febrero 25, 2011

Cita XVI

Avivaba el maestro a sus discípulos, para que nunca se marcharan a casa con las dudas surgidas de sus lecciones. Siempre preguntaba a quien observaba con cara pensativa, y en un día del invierno de 1.267aC, Ptolomeo, tras un largo silencio en el aula magna, dijo con la solemnidad acostumbrada, dirigiéndose a sus alumnos;

"En vida las preguntas, y después de la muerte, las respuestas."